desayunando con la mascota

fuimos a un restaurant y pedi dos menus desayunos preparados.

"quizas te enjaularon por vestir asi de mal" -dije en broma- "pareces un animal, pero yo me encargare de que te veas mejor que una doncella".

tenia mi mente repleta de ideas con respecto a prendas para ella ya que su fisico era muy contrario al mio, todo lo que yo no podia usar, en ella quedaria bien.

-Pero no me gustan los vestidos.- Dijo un poco apenada.
-Ademas si visto asi es porque me gusta la comodidad que me brinda.- Extendio su vestido rasgado y manchado en tierra.
Casi de inmediato una mesera llego y les entrego el desayuno.
-Buen provecho.- Dijo la mesera para luego retirarse.

"entonces usaras ropa a lo marimacha pero lo mas femeninamente posible" -comence a comer- "vamos come antes que se enfrie".

Timidamente comenzo a comer.
-¿Porque me tratas asi? ¿que quieres?.- Dijo seriamente mientras comia lentamente.
-Si buscas adoptarme jamaz lo lograras, soy libre y hago lo que quiero, no me interesa una madre ni una hermana.- Dijo seriamente sin mirarle.

"tienes razon, nose que intento lograr con esto. mi obsesion por el bien vestir me llevo a ayudarte, nada mas" -dije despreocupadamente- "si no quieres, termina de comer y te largas".

-No quiero vestirme bien, no quiero generar lazos. Pero quiza podamos divertirnos un rato.- Sonrio sadicamente mientras pateaba el piso y generaba un temblor en todo el edificio.
-Comida gratis.- Tomo su plato y salio caminando mientras mantenia el temblor en el lugar.
Las cosas se caian de las repisas y los vasos se rompian, la gente corria rapidamente mientras gritaba del susto.

"tu humor es demasiado infantil y sin sentido. cuando ganas criterio por culpa de la edad y el mundo, cosas como estas no te causan gracia" -dije secamente- "ve y diviertete si quieres, ya al menos calmaste la fatiga" -deje unas monedas sobre la mesa, suficiente para pagar un plato nada mas y sali de la temblorosa tienda-.

de lo unico que me arrepiento, fue de decirle mi nombre. me fui caminando en direccion opuesta a ella buscando una tienda de ropa.

-No digo que fuera divertido.- Corrio hasta alcanzarla.
-No hiba a pagar por esa comida.- La siguio mientras comia tranquilamente y el temblor desaparecia.
-Me caes bien, pero creo que no me conoces del todo porque no soy una niña.- Le miro seriamente. -Tengo 23 pero no aparento porque... bueno es una historia bastante larga. Ya hice algo para salir de ese incomodo lugar, ¿que quieres hacer?.-

"yo tampoco lo hiba a pagar" -dije seriamente- "solo pague mi plato".

su alborotada forma de actuar choca de frente con mi introvertida identidad.

"tampoco es que quiera conocerte, podras decirme que tienes 2 años, 23, 70, me da igual. es como actuas el reflejo de tu madurez. el ser niño JUSTIFICA la inmadurez, por ello es que se asocia con la primera etapa de la vida" -explique- "yo ire a una tienda de ropa, si tu no quieres, cosa tuya. pero en si voy para comprarme cosas para mi".

-La proxima vez que te vea no te va a gustar pendeja.- Dijo seriamente mientras daba media vuelta quedando parada sin moverse pero dandole la espalda.

"jajajajaja, me recuerdas a mi cuando joven" -dije alegremente- "no seas caprichosa y vamos, que no soy rencorosa por nimiedades".

Volteo y la miro con una cara de furia y desprecio que en un instante se convirtio en una sonrisa.
-Vamos!.- Corrio y la tomo de la mano para acompañarle a su destino.

cuando encontre una tienda de ropa, estuve mirando que comprar para mi durante muuuucho tiempo, ensimismada en mis pensamientos. probandome todo, mezclando y todo lo que me dejase conforme, comprandolo.

-¿No has pensado en diseñar tus propios vestidos? no hacerlos tu, diseñarlos... quiza asi quedarias mas conforme y se nota que te gusta mucho esto.- Dijo amablemente la chica mientras veia como Komachi no paraba de probarse ropa.

"si mis manos pudiesen, lo haria. pero no planeo volverme sedentaria hasta dentro de un par de años mas. sigo siendo joven asi que aprovecho de hacer cosas que despues me costaran mas. cuando cresca quizas tenga una tienda y me haga modista, por ahora no".

-Seria buena idea...- Dijo seriamente.
-No se que me quede bien, siempre uso esta ropa y no la e cambiado en mucho tiempo, aunque no me guste ponerme muchas cosas aveces no me gusta el olor.- Dijo seriamente.

chispee los dedos mirando a las modistas.

"quiero que hagan ver bien a esta chica sin que la ropa limite sus movimientos, suele practicar deporte, pero ello no amerita que no pueda verse bien, ustedes me entienden" -les guiñe el ojo-.

Las modistas comenzaron a moverse de un lado a otro haciendo que la joven quedara inmovil, de vez en cuando levantaban sus brazos y le hacian estirarse. Luego de un par de minutos llegaron con varias prendas deportivas bastante comodas, pero con el que se quedo fue con una camisa de manga corta color negro con un pequeño chaleco bastante comodo que se amoldaba en sus brazos para no caerse, un pantalon de licra bastante ajustado pero nada apretado y una pequeña falda que le llegaba a la mitad de la rodilla y su cintura.
-Me siento rara...- Dijo seriamente mientras se miraba en un espejo.
-Es como si no fuera yo pero es comodo... es extraño... ¿soy yo?.-

"no" -le toque el hombro- "eres una mujer nueva. lo que sientes al verte en el espejo ahora es orgullo. ya no debes verte con verguenza ni oler mal".

me fui a la caja y cancele todas las compras. tome las dos bolsas con lo mio.

"fue un gusto conocerte muchacha, sera hasta una proxima ocasion" -sali de la tienda-.

-¿Te vas tan pronto? bueno, nos vemos...- Dijo un poco desanimada mientras no dejaba de admirarse en el espejo.
Komachi se a desplazado del lugar, favor de continuar en el area correspondiente.