Reclutando a la ultima miembro

Al llegar al bar indicado las personas quedaron calladas ante mi presencia.
-¿Porque no me sorprende?.- Dije en voz baja.
-¿En donde esta Mami? diganmelo ahora o se arrepentiran.- Dije esperando que se mostrara.

Estaba tranquila en mi taburete favorito platicando tranquilamente con el barman, siempre hablaba con el porque siempre me informaba sobre los rumores interesantes que transcurrían por la ciudad, ademas de que el también me informaba de bueno trabajo, continuábamos con nuestra charla amena cuando de repente algo silencio el bar, voltee a mirar a la puerta y me percate que el caballero Hiru, la señorita Esmondun y...una chica bastante alta entraron al bar, cuando el comenzó a decir que requería mi presencia, no podía quedarme ahí sentada pues su voz sonaba seria.

-Buen día Caballero Hiru, veo que lo acompaña la señorita Esmondun y una misteriosa chica, a que debo el honor de su presencia-dije en tono amable y haciendo una pequeña reverencia.

Sospecho que esa chica es una nueva integrante...aunque por su altura, dudo que Hiru haya usado la misma táctica que uso con la señorita Esmondun.

-Tienes que venir con nosotros ahora mismo, y no aceptare un no por respuesta.- Di media vuelta y me detuve antes de salir.
-Ademas le debes algo a la señorita Esmond.- Sali del lugar caminando tranquilamente.

-Vaya, parece que no esta de buen humor caballero Hiru, y tiene razón, debo entregarle su capucha a la señorita Esmond, pero lamentablemente esta en mi casa, así que creo que deberíamos hacer una parada ahí-dije en tono amable y con los brazos cruzados.

Algo me dice que Hiru no se levanto con el pie derecho hoy.

-¿Nos vamos? o vas a seguir hablando sin sentido.- Sali del lugar y la espere afuera.
-Me carga tener prisa y que se pongan de mamonas...- Dije molesto.

-Debería aprender a relajarse caballero Hiru-dije en tono tranquilo mientras lo seguía.

Debe tener cuidado o llamara mucho la atención de las personas, no necesito que me descubran tan pronto como maga los aldeanos.

Mire a Hiru el cual se notaba muy molesto – tranquilízate no vas a ganar nada impacientándote así…- le dije en voz baja para ue nadie mas que el me escuchara, puse mi mano en mi hombro y le sonreí un poco – así que vamos mejora tu humor…- le dije de manera seria.

"no le den razones, es la mejor forma de ayudar para evitar conflictos o malos entendidos. ¿es necesario que vayamos todos por una jodida y arapienta prenda?" -dije despectivamente-.

-Ya despues pueden regalarse sus vestidos, vamonos. Machi desde ahora eres mi mano izquierda y derecha.- Dije seriamente mientras avanzaba hacia el bosque tranquilamente.

-Parece que esta molesto con mi persona, supongo que solo me llamo porque necesita de mis servicios-dije en tono tranquilo mientras los seguía al bosque.