Reclutando junto a un hermoso paisaje

-Me temo que no son de mis aliados-dice seria-Disculpen caballeros pero no quiero que esta situacion se ponga violenta, asi que les pido amablemente que se retiren si es que no quieren pagar con su vida-dije en tono mostrando cierta molestia y desenfundando mi arma.

-Calla muchacha, nosotros no venimos a juguetear como ese pendejo templario, van a venir con nosotros y haran lo que decimos por las malas o por las malas.- Uno de ellos se dejo mostrar, era un muchacho de una edad masomenos como la de Mami, levanto ambos brazos y luego apunto hacia mami dejandola inmovilizada.
-¿Que te parece? magia de raiz sobre el control mental, solo que este muchacho controla tu cerebro jajaja.- Dijo el de el centro mientras daba un paso al frente, un señor de edad avanzada, aparentes 35 años. Apunto con su dedo hacia Cassey y la apriciono de pies y brazos con pilares de piedra creados para sostenerle.
-Y viene el toque final muchachitas.- El ultimo muchacho el cual era bastante joven comenzo a mover rapidamente sus manos y las hiso deslizarse hacia ellos.
-Jajaja, deja de presumir bastardo.- Dijo el dueño del contorl mental.
-Ahora nos las llevaremos y tendremos una gran paga, ya tengo a mi cuartada asi que no se preocupen solo le tendremos que dar el 2% de la ganancia jajaja.-

Por mas que trataba de moverme o de liberarme no podía, - porque rayos hacen esto!! Si son magos también porque nos hacen esto!!- dije aun asiendo un esfuerzo por liberarme pero todos mis intentos eran en vano.

Mi cuerpo se encontraba paralizado, pero lo que realmente me molestaba es que se estaban acercando a la señorita Esmondun, se acabo es mas de lo que puedo soportar, usando toda mi fuerza de voluntad logre mover lo suficiente mis manos para arrojarles un recipiente con aceite y despues dispare haciendo que rapidamente haciendo un muro de fuego, espero que esto sea suficiente para poder hacer un contra ataque o las cosas no acabaran bien aqui

El fuego se encendio de inmediato pero no parecia haber causado ningun efecto. El viejo poseedor de la magia de tierra provoco un crater en el fuego ahogandolo con tierra como si se lo hubiera tragado.
-¿Es todo lo que pueden hacer? ja... vamonos antes de que terminen mal heridas.- Comenzaron a avanzar mientras el joven no dejaba de mover sus manos para traerlas levitando junto con ellos.

-¿Y se puede saber a donde van con tanta prisa?.- Dije mientras quedaba detras de ellos.
-¿Se supone que son magos? vaya pues no son tan malos, pero porfavor... no sean tan aprovechados, mira que ir contra ellas justo cuando me retire del lugar, muy mal muchachitos.- Dije seriamente.
-Vamos a tener que arreglar esto seriamente.- Puse mi mano frente a mi apuntando hacia Cassey y la chica que nos interumpio para quitarles toda la magia.
-Si quieren pelear contra ellos chicas, ahora tienen ventaja, si no dejenmelos a mi jaja.- Dije burlescamente alzandome de hombros.

Rapidamente gire mi mosqute y le solte un fuerte golpe a la cara al que me controlo, luegos girnaod rpaidamnete el mosquete golpie en el estomago a el de la tierra, dando un ultimo giro golpee al que quedaba en la cabeza y sin perder tiempo apunte mi mosquete al que me controlo y le dispare casi a quema ropa.

-Bravo muchacha tienes talento, pero no sirve de mucho golpearles, de echo.- Corri rapidamente desenfundando mi espada, utilize mi magia para crear fuego e impulsarme como si tubiera patines hacia los 3 magos.
-Si no cortas.- Dije mientras partia en 2 al mas joven.
-O detonas.- Dije mientras giraba y ponia mi mano en la cabeza del anciano para crear una bola de fuego que luego explotaria y comprimiria para que no quedara nada, haciendo asi que lloviera muchisima sangre por todas partes.
-El enemigo puede recuerarse y volverte a atacar.- Le mire de frente de una manera seria.
-Espero que reconsideren su posicion y mi propuesta.- Guarde mi espada y espere a que la lluvia de sangre terminara para dar media vuelta e irme.

de inmediato me puse la capucha pues no me quería manchar mas de sangre, - que asco!!- alce mi mano y la use como si fuera un paraguas era sangre pero seguía siendo liquido, y ya de esta manera no me mancharía, me acerque a Hiru y le sonreí – gracias por salvarme llegases en el momento mas oportuno…- dije en un tono serio pero con una sonrisa en mi rostro.

-Demasiada oportuna pero, difiero de tus metodos, no se porque los chicos tiene tanta fascinacion por ver sangre y organos-dije notando que mi traje estaba muy manchado-Caballero, lamento mencionar que su observacion fue un tanto erronea, yo tambien puedo provocar una carniceria como esta pero...hice una pequena pausa-No es correcto hacer esta cosas frente a una fina dama como la señorita Esmondun...ademas el olor a sangre quemada nunca a sido de mi agrado-dije con una sonrisa mientras sacudia mi traje para quitar algunos trozos de carne que tenia en mi traje.

-"Señorita", en primer lugar su nombre es Esmond, y en segundo lugar si no fuera porque llegue aqui seguirias atrapada y posiblemente a estas horas ya estarias siendo violada por el Papa y llevada al calabozo para tu sentencia, acepto tus disculpas y me agrada que me des las gracias pero porfavor no exageres.- Dije con ironia.
-Y perdoneme por mancharle el traje, quiza matar algun dia sea mas limpio sin posibilidades de arruinarle su persona.- Dije un poco molesto.
-Cassey, cuidate mucho de las personas que puedan aparecer si no quieres terminar con ellos.- Me aleje un poco.
-Y señorita, no tengo problemas con usted pero deberia cambiar su actitud y dejar de ser una "Señorita", ¿Sabias que ese anciano poseeia magia avanzada? en un santiamen, incluso con los ojos cerrados y agonizante podia enterrarte una estaca desde las piernas hasta el cuello y partirte en 2. Tengan cuidado, y traten de no morir para mañana que las vere temprano.- Me retire sin decir nada mas ni esperar una respuesta.

No me gustaba como discutían, pero no era algo que yo pudiera hacer para que parara – sabes señoría mejor me boy a mi casa sola, en este momento estoy un poco fastidiada y severa raro que este manchada de sangre me expondría mas…- me quite la capucha y se la di – tome la necesita mas que yo- hice una reverencia y me manche rápidamente de el lugar ya deseaba llegar a mi hogar.

-Le agradesco mucho el noble gesto señorita Esmondun y prometo regresarsela limpia y sin rastros de sangre-me coloque la capucha con cuidado-Por favor cuidese mucho de esos hombres y sobre todo tenga cuidado de Hiru, no porque sea una amenza, sino porque algo me dice que le pedira algo mas en su segunda cita-termine de decirle giñandole un ojo para rapido desaparecer del lugar.

Las cosas se pusieron mas peligrosas de lo que crei, tendre que armarme de todos los trucos que se si es que quiero sobrevivir y cumplir mi venganza, la proxima vez no sere tan benebolente con mis oponentes, les hare sentir el mismo infierno en carne propia.